EL NUEVO ORDEN
RUMBO A LA REELECCIÓN 2019El Nuevo Orden
Para la reelección de Mauricio Macri es preciso postergar la definición de grandes temas argentinos pero los promotores del Nuevo Orden finaciero-corporativo global parecen dispuestos a permitírselo, explica el autor en un texto altamente recomendable:
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Por RAFAEL GUERSCHANIK
Ex funcionario, consultor y periodista de investigación.
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La Administración afirma conocer que su nuevo posicionamiento geopolítico le asegura, en caso de nuevas turbulencias o de necesidad electorales, los 'waiver' necesarios.
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El Mundial de Fútbol nos permitió ver cómo Rusia, otrora emblema del comunismo, en su transformación ha dejado atrás esas políticas como un capitulo de la historia del siglo 20.
A la vez, nos abre una ventana para analizar las paradojas de este Nnuevo Capitalismo que, después de la crisis financiera global de 2008, > ha devaluado instituciones tales como los organismos multilaterales (FMI, Banco Mundial, OCDE y OMC), y > ha mutado aquella banca de inversion en quiebra 'subprime' en calificadoras de riesgo que determinan si un país es "emergente" o "de frontera" (Morgan Stanley / MSCI). En estas mutaciones ha quedado en evidencia que estas organizaciones del Nuevo Orden Financiero no son ajenas a las subjetividades políticas. Ya quedó demostrado en el caso de la renuncia de Paul Romer, economista jefe del Banco Mundial, luego de reconocer que los informes de esa institución acerca de Chile, durante el más reciente período electoral, perseguían un objetivo político. Aquella grave situación también permitió exhibir cómo estos organismos multilaterales intentan impactar con su apoyo/crítica a gobiernos 'market friendly'. El Nuevo Orden Corporativo, que potencia una guerra comercial a gran escala, que nos aleja día a día del liberalismo de John Locke, Adam Smith y David Ricardo, circunscribe el presente y futuro del planeta Tierra a la evolución de dos de los costos básicos de los distribuidores de la riqueza demográfica: > la energía y > el costo de financiamiento. En esta guerra comercial, todo queda en manos de los exportadores de petróleo tales como USA, Rusia y Arabia Saudita + el resto de la OPEP, provocando una curiosa interacción entre > la definición del precio y la regulación de su producción, perjudicando o beneficiando a uno de los países que más importan (los casos de China, Japón, Alemania y otros países importadores); y > el déficit fiscal estadounidense producto de la baja de impuestos y la suba de gastos, que termina aumentando el costo del dinero en el mundo. Si se le suma el riesgo-país que indican las calificadoras bancarias para los 'emergentes' y 'de frontera', se tiene el combo perfecto para determinar el costo del dine ro futuro a escala global. Ni siquiera hace falta considerar que, gracias al financiamiento internacional sin riesgo-país incluido, el Nuevo Orden Corporativo rescató a sus grandes empresas quebradas en 2008 con emisiones apocalípticas de dinero. Luego de la caída de Lehman Brothers, los promotores del capitalismo decidieron dejar de lado la obviedad que en la teoría capitalista el mercado debía haberse hecho cargo de sus quebrantos. Para colmo de males, hoy día la amnesia mediática de los voceros del Nuevo Orden provoca que se promueva con orgullo la paradoja histórica del 'America First' como parte de ese capitalismo. Es en este contexto internacional el gobierno argentino puja por pertenecer, y por eso utiliza el manual convencional, pidiendo un rescate financiero al FMI para así aseg urarse el apoyo político y financiero que le permita una supuesta victoria en las elecciones de 2019. El monto y el otorgamiento, anunciados sin necesidad de pasar por la aprobación del directorio del FMI, resultó otra demostración del apoyo político de las potencias económicas a la Administración. Ella afirma conocer que su nuevo posicionamiento geopolítico le asegura, en caso de nuevas turbulencias o de necesidad electorales, que el FMI le brindará los imprescindibles 'waiver' necesarios. (Es curioso recuperar en el siglo 21 aquel lexico de los años '80). Luego de una devaluación del 50% que descomprimió la bomba de las Lebacs en un 30% y dolarizo las tarifas del servicio público y los combustibles, dejando en pesos los gastos públicos, jubilaciones y salarios -que aún subiéndolos 25% bajará el déficit fiscal-, se logrará la magia de que nadie en particular sea responsabiliza do por las consecuencias sino que el ajuste será ejecutado por el anónimo 'mercado'. Estas medidas tales como > devaluación, > desactivación de las Lebacs, y > modificación del índice de ajuste de las jubilaciones coinciden, 'casualmente', con las sugerencias del FMI. Analizando en perspectiva el rediseño del equipo económico y la confirmación del mando de la Jefatura de Gabinete de Ministros, dudamos que el famoso show del 28/12/2017 -evento que muchos liberales consideran el principio de la crisis cambiarias-, resultara un error. Más bien parece haber sido una táctica exitosa, según las recomendaciones del FMI. De confirmarse esta hipótesis, los siguientes pasos convalidarían la famosa estrategia electoral de devaluar en los años no electo rales y anclar el dólar en los años electorales, generando así un 'efecto riqueza' que pueda o seducir o calmar los enojos del público elector. Apenas le restaría a los asesores de imagen comenzar rápidamente a difundir en los medios de comunicación 'amigos', nuevas encuestas de opinión pública bañadas de optimismo, y así iniciar la carrera hacia la reeleccion. Sin embargo, aún ganando las elecciones 2019, al gobierno le quedaría un gran desafío: recuperar la confianza perdida. Sucede que no alcanzará con un relato freudiano de reconocer errores menores en su gestión, atribuyendo los problemas a factores externos, eludiendo sus propias culpas y negando otras opciones a sus politicas. Una conclusión inicial: la Administración no podría evitar su mayor desafío, el de atravesar su 2do. mandato convertido en un gobierno débil respecto de la autoridad que necesitará para enfrentar las consecuencias del pago de la deuda externa generada en ese camino hacia la reelección. Sin duda alguna, es el nudo gordiano que deberá resolver el gobierno. Es su gran dilema: el costo de una devaluación del 100% en 2 años, habiendo dolarizados los precios de los servicios públicos y de los combustibles. Esto ha provocado que los aumentos tarifarios originalmente programados deberán duplicar su valor en pesos, los que los hace impagables por la sociedad. En esa dirección se debería interpretar los primeros cambios ministeriales y el replanteo del aumento tarifario originalmente programado en 250%, tal como si fuese un autogenerado 'virus anti-relato'.
En tanto, los K miran la suerte de su amigo Luiz Inácio Lula da Silva; y el resto de la oposición se pierde en su propio laberinto, mermando sus posibilidades de amenaza electoral. Esta frágil oposición sólo puede provocarle a la alianza política gobernante el daño colateral de exponer sus propias contradicciones domésticas con sus socios, mientras acumula la tarea pendiente. |
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