FCC logró 1.000 millones pero la Argentina no pudo US$300 millones

La empresa española de construcciones y servicios FCC ha cerrado con éxito su rescate financiero con la ampliación de capital de 1.000 millones de euros con los que la empresa reforzará sus recursos propios. Esto ocurrió en la misma semana que el Estado argentino no consiguió ni US$300 millones. En el caso de FCC, ingresó Carlos Slim, quien aportó 500 millones de euros comprometidos (y se quedó con 25% de la compañía), pero también Bill Gates (6%). Según aseguran fuentes financieras, los 133,3 millones de acciones nuevas puestas en circulación han sido suscritas en su totalidad por inversores institucionales. El fondo soberano Norges Bank Investment Management, el N°1 del mundo -con más de 600.000 millones de euros-, consolidó el 2,5% que ya tenía.

¿Hay dinero líquido en el mundo? Sí. Pero no fluye hacia cualquier oferta. Para una colocación exitosa de deuda o de ampliacion de capital hay que seguir tanto reglas escritas como no escritas en el mercado financiero global.   El Estado argentino creó que era sencillo. No lo es. En cambio la constructora y empresa de servicios expañola FCC (Fomento de Construcciones y Contratas) respetó todo el protocolo y, más allá de sus dificultades, obtuvo los 1.000 millones de euros que buscaba en la semana que la Argentina apenas rozó los US$300 millones.   FCC había preparado el camino anunciando su desembarco en Qatar con un negocio de agua, al adjudicarse el contrato de construcción y posterior gestión durante 10 años del sistema de saneamiento de la ciudad de Al Dhakhira por un importe de 300 millones de euros.    Con este 3er. movimiento, la empresa que preside Esther Alcocer Koplowitz, a través de su subsidiaria Aqualia, se consolidó en Cercano Oriente, donde ya tenía presencia en Arabia Saudí y Emiratos Árabes Unidos. En este caso, su partner fue la surcoreana Hyundai, para el diseño, la construcción, la operación y el mantenimiento de las instalaciones de tratamiento de agua residual, de las estaciones de bombeo y de los colectores asociados en una ciudad qatarí ubicada a 60 kilómetros de Doha.   Aqualia aseguró que puede convertirse en la "empresa española especializada en la gestión del ciclo integral del agua con mayor presencia en este territorio [Oriente Próximo]".   En forma simultánea, avanzó su ampliación de capital. La compañía prevé anunciar el lunes 15/12 que el capital de la compañía estará liderado por Carlos Slim, con 25.6% seguido por los fundadores Koplowitx, que mantendrán el 22,5%. Después, Bill Gates, con 6%, y un grupo numeroso de fondos institucionales, con participaciones inferiores al 3%.   Algunos afirman que, gracias al bajo precio que se había establecido, abundó el interés de las gestoras de patrimonio y fondos de pensiones dispuestos a entrar en el accionariado de una FCC mucho más saneada.    Con estos 1.000 millones de euros, FCC tiene previsto destinar 765 millones a liquidar 900 millones del préstamo que la tuvo a mal traer (Tramo B), tras aplicar una quita del 15%, ya pactada con las principales entidades acreedoras.   El remanente de 490 millones de euros del Tramo B (450 del principal más 40 de intereses capitalizados) bajará la tasa de interés de 13,5% a 5%, un ahorro en intereses de 160 millones de euros.   El resto del dinero será destinado a sus subsidiarias Cementos Portland Valderrivas (100 millones de euros) y FCC Environment (100 millones). Los 35 millones restantes se dedicarán a los gastos derivados de la operación.    Queda la duda de si George Soros, que ha llegado a tener el 4% del capital, ha suscrito su participación correspondiente o no.    Vale la pena remontarse a 1 año atrás, un análisis publicado cuando Bill Gates adquirió el 6% del capital social de FCC, con una inversión de 113,5 millones de euros:   "(...) José Luis Martínez, estratega de Citi en España, explica que “la inversión que llega a España se está dirigiendo a la banca de forma prioritaria, pero también a la deuda pública y las emisiones, pocas, de renta fija privada”. Cree que las compañías españolas pequeñas y medianas pueden ser una buena oportunidad de inversión para el capital extranjero, pero éstas tienen que darse a conocer en el exterior. “Hay grandes oportunidades aunque por el momento son grandes desconocidas”, reconoce.   Para  Juan Ramón Rallo, profesor de la Universidad Rey Juan Carlos y director del Instituto Juan de Mariana, los sectores españoles que más pueden beneficiarse de la entrada de capital extranjero en estos momentos son “los más apalancados y necesitados de capital”.    “La banca es un ejemplo clásico. Aunque, por los mismos motivos, si el capital vuelve a salir sería de los más perjudicados”, advierte.   Santiago Carbo-Valverde, catedrático de Economía de la Bangor University de Reino Unido e investigador de Funcas (Fundación de Cajas de Ahorro españolas) cree que “la llegada de la inversión extranjera está propiciando una corrección algo más acelerada que hasta ahora de los activos inmobiliarios”. En general, observa que “las empresas con un buen negocio pero con problemas de deuda, en cualquier sector, son las que despiertan más interés”.  (...)".