SUBSIDIANDO LA INEFICIENCIA

El “sueño americano” del iPhone 6 argentino se empantanó en Tierra del Fuego El delicado equilibrio en que se encuentra la política de empleo en lo que va del gobierno tornó una utopía cumplir con el sueño iconoclasta de trasplantar en el país el iPhone 6, porque Apple exige condiciones que chocan contra los intereses de una industria superprotegida en Tierra del Fuego que, en teoría y aunque resulte ineficiente como actividad tecnológica porque se limita a armar partes importadas, le da trabajo a más de 10.000 personas, bastantes más caros de los que se puede comprar en, por ejemplo, Chile, que tiene menos problemas de empleo que la Argentina. Macri tuvo que optar por impulsar un plan canje financiado por el Banco Mundial que concrete el recambio tecnológico de los aparatos de la tecnología 2G, a la 3G y de ésta a la 4G a valores accesibles, antes que saciar una estrategia de marketing que consiste en mostrar que el país está en condiciones de tener lo mejor. Por eso el nuevo iPhone deberá esperar. Resignados, los retailers como Movistar, Claro y Garbarino procuran que el INTI aunque sea les homologue el 5 y el nuevo iPhone SE, que es un equipo del tamaño del 5 pero con prestaciones más similares al 6S y un precio más bajo. ¿Pero cuánto más bajo?

iPhone 6, habrá que seguir importándola 'por la propia'.

Semanas atrás, empresarios de la industria electrónica de Tierra del Fuego presentaron a la gobernadoraRosana Bertone y al ministro de Industria, Ramiro Caballero, una propuesta de nuevas inversiones destinadas al desarrollo de la Provincia “a través de la ejecución de proyectos complementarios a la actividad económica predominante que representa la industria electrónica”. La isla de Tierra del Fuego no explota en forma conveniente sus ventajas competitivas pero le exige al resto de los argentinos que la subsidie a través de una industria electrónica sólo posible a costa del atraso tecnológico. Mauricio Macri conoce de Tierra del Fuego tanto como los Kirchner: aprovechando la famosa promoción industrial fueguina, en 1983 fundó junto con su amigo Nicolás Caputo la empresa Mirgor S.A.,de la cual Macri se retiró en 1994. Mirgor fabrica equipos de aire acondicionado apuntando a la industria automotriz y sigue activa. De hecho, Caputo es el empleador Nº3 más voluminoso en el emporio protegido fueguino. ¿Es posible reconvertir Tierra del Fuego? Bueno, es lo que prometió Rubén Cherñajovsky, dueño deNewsan, el empleador Nº1 del emporio importador. Mientras él coqueteaba con Daniel Scioli, envió a su ejecutivo Nº1, Luis Galli, a frecuentar la Fundación Pensar. “Más allá de lo que pase en el país, nuestro proyecto es en 4 años equilibrar importaciones y exportaciones”, dijo Galli. Cherñajovsky comenzó con un vínculo con la japonesa Sanyo Electric Trading. Un par de décadas después, es dueña de las marcas Noblex, Atma, Siam, Philco, Sanyo y Sansei, y licenciataria de JVC, Pionner, Compac, Braun y Microlab. Además produce por cuenta y orden de Motorola, LG, la chinaHuawei, Panasonic y Sony, entre otras. Hoy día, Newsan, BGH y Mirgor han comprado tiempo. También el Grupo Garbarino, que produce para Samsung.La decisión de Macri es mantener, por ahora, los privilegios de Tierra del Fuego, donde tanto incursiona el ministro del Interior, Rogelio Frigerio, por su amistad con la gobernadora Bertone. Argumentos nunca faltarán. En definitiva, todo mal para que desembarque en Argentina el pack estelar de Apple, compuesto por el iPhone 6, el celular inteligente de última generación más vendido del mundo, junto a la tableta iPad y algunas computadoras Mac. El presidente Mauricio Macri; su jefe de Gabinete, Marcos Peña; y el ministro de la Producción, Francisco Cabrera, lo soñaban como ícono de la inserción argentina en la vanguardia tecnológica, pero la radicación arrastra muchas más trabas que el cepo levantado al comenzar la gestión del actual gobierno. La ilusión creció cuando el kirchnerismo abandonó la Casa Rosada y la compañía californiana, junto con los retailers nacionales, completaron los trámites necesarios para traer las tabletas y notebooks con el logo de la manzanita. No obstante, no se trata de Apple sino que el tema es mucho más amplio y tiene que ver con un modelo K que cuestionaban los ex opositores hoy oficialismo. Pero que parecen sin voluntad ni ideas de modificar. El desafío era cómo hacer entrar en competencia en un mercado regulado como el nuestro a un dispositivo de avanzada que, liberado y con 64 GB de memoria, está costando US$ 650 en un Apple Store, a los que el impuesto por exceder la franquicia de US$ 300 en la aduana sumaría US$ 175 más. Ya se sabe que la economía cerrada alienta la presión tributaria excepcional. Y la presión tributaria excepcional permite pagar gastos públicos tan voluminosos como clientelares. Por ese motivo los motivos de apertura son tan complejos: requieren de reducción de impuestos hacia un estándar y acotar el gasto público. Chile lo consiguió, y no necesita castigar a su gente con tecnología electrónica antigua. Semejante decisión tampoco afecta su tasa de empleo. En el caso de los 'cafishios' empresarios con base en Tierra del Fuego, los números siguen sin dar: con el impuesto del 35% en la más reciente versión S de los iPhone 6 de 16 GB el precio final de venta la público trepa algo encima de los US$ 2.000, que duplica a los Samsung de alta gama hechos en Tierra del Fuego y, lo que es peor, aún no resuelve el enorme gap que existe entre traerlo de afuera aun asumiendo la alícuota aduanera y comprarlo en algún comercio local. La expectativa era anunciar la radicación en el 1er. trimestre del año. A causa de que no se zanjaron las diferencias, empezó a pensarse en el 2do. semestre, y ahora se la ve como una posibilidad remota. Las negociaciones se terminaron de trabar cuando Apple quiso que las “telcos” subsidien parte del precio de venta del costo del equipo, tal como ocurre en USA y otros mercados. No es factible porque en nuestro país existe un régimen de promoción a la industria electrónica dedicada a esos menesteres en Tierra del Fuego, del que dependen aproximadamente 10.000 personas. Además las inversiones realizadas en el sector llegan a los US$400 millones (no lo digan en voz alta, no sea que provoquen carcajadas en Silicon Valley: ¿con magros US$ 400 millones quieren levantar un polo tecnológico?). En cuanto a la producción de teléfonos móviles en la provincia austral, en las fábricas allí  instaladas se llegaron a ensamblar 13.906.093 unidades. El año pasado salieron casi 12 millones de la línea de producción. En definitiva, lo más moderno y más barato habrá que seguir comprándolo o en Chile o en Paraguay o traerlo de Miami engañando o coimeando al agente aduanero: es el nefasto sistema que impera en la Argentina por decisión del Estado. Así se llegó a las empresas offshores y las cuentas en el extranjero. Cualquiera lo sabe pero Cambiemos no cambiará casi nada de todo eso, tal como recuerda el economista José Luis Espert.... Importaciones La empresa californiana se negó siempre a ello y no pudo ingresar más equipos de manera oficial al país. Por eso es que ahora aguardaba el resultado de la solicitud de Movistar, Claro y Garbarino al Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI) para que homologue los equipos de la marca, lo que aún no se aprobó por más que haya en funcionamiento miles de unidades ingresadas fuera de Aduana. Frávega y Personal, en cambio, supeditaron la comercialización de los dispositivos en cuestión a que se los pueda importar pero no gestionó la aprobación al organismo que depende del Ministerio de la Producción. Pero también planteó exigencias a los distribuidores y a los operadores de telefonía móvil de que los equipos dañados sean reparados por un servicio técnico oficial de la empresa. Fracasado por el momento el intento de ingresar el iPhone 6, una de las posibilidades barajadas por Apple y los negociadores locales era traer la versión anterior, el 5, y el nuevo iPhone SE que es un equipo del tamaño del 5 pero con prestaciones más similares al 6S y un precio más bajo. Si bien todos los modelos están en trámite de homologación en el INTI, se trata de equipos antiguos para un cliente tradicional de iPhone, por lo que se dirigirían a un público muy limitado: los que no puede viajar al exterior o los que pretenden acceder a la marca. Como estarían por encima de los $20.000 y en el 2do. semestre se lanzaría el Samsung S7 a un precio menor gracias a que se ensambla en Tierra del Fuego porque no paga el 35% de impuesto, la movida no reviste por ahora sentido económico. Sí de posicionamiento, pero ese sería otro asunto. En eso anda Claro, que podría ser el primer operador en volver a traer el iPhone a la Argentina, mientras Telefónica y Garbarino están en un estadío similar de la negociación. Apple estaría en busca de una locación central en la que concentraría el servicio técnico, pero no un Apple Store. Sólo de este modo iPhone podría volver a la Argentina pero no en su última versión ni a un valor que movilice ventas. Fabricantes como Samsung, decidieron traer las líneas de su tope de gama para la producción en Argentina, como el Galaxy S III, que era ensamblado en las fábricas de Tierra del Fuego. La surcoreana, no sólo hace el Samsung Galaxy S III y móviles de alta gama. También los de Samsung decidieron fabricar productos de gama baja y gama media. Con la producción generada en nuestro país, abastece el consumo interno. BlackBerry también optó por fabricar en Tierra del Fuego su Smartphone más vendido (en el país): el Curve 8520, la ex RIM produce en el sur algunos de sus móviles de la línea Bold, entre otros. Otras marcas como por ejemplo LG, produce su saga Optimus en Argentina. Nokia no sólo eligió sus gama baja para hacer en Argentina, también produce sus tan populares Lumia, de hecho en junio llega su caballo de batalla, el Lumia. Tierra del Fuego En la práctica, el gobierno está en otra cosa que traer el iPhone 6. Motoriza un plan para mejorar las comunicaciones móviles que consiste en favorecer la migración de los usuarios que utilizan redes 2G y 3G a 4G, permitiendo además el acceso a teléfonos de menor costo para las personas de bajos recursos. El ministro de Industria fueguino, Ramiro Caballero, anunció que los modelos de celular que cumplen con el requisito de poseer la tecnología denominada “4G” se fabricarían a un costo base de entre $2.200 a $2.400 por unidad. “Lo más importante es que las empresas de la provincia les han demostrado, tanto a la Secretaría de Comercio Interior, como al Ministerio de Comunicaciones y a las telefónicas que están en condiciones de realizar esta operatoria de una manera competitiva”, afirmó. El ministro de Comunicaciones, Oscar Aguad, había adelantado al lanzar la iniciativa a fines de febrero, que el plan demandará una inversión total de "100, 150 o 200 millones de dólares", y que “hay un ofrecimiento del Banco Mundial para realizar la inversión". “La idea es reemplazar a la tecnología obsoleta y hacerlo a un costo accesible. El Gobierno Nacional también está en tratativas con las telefónicas para que el precio final de los aparatos no difiera demasiado del costo de producción que proponen las fábricas fueguinas”, enfatizó Caballero. Fueron evaluados los volúmenes de producción del plan canje a fin de “asegurar y tal vez mejorar” las fuentes de empleo en el sector, luego de las reducciones producidas en los últimos meses por la caída en las ventas de productos electrónicos en el mercado interno. Según indicó, las industrias fueguinas fabrican a razón de entre 800.000 y 900.000 celulares mensuales, con lo que “estarían en condiciones de lanzar los nuevos teléfonos para la venta en 90 días y podrían seguir produciéndolos durante todo el segundo semestre de este año”, observó. El funcionario aludió así a la posibilidad de que las telefónicas presionen al Gobierno para que se autorice la importación de al menos parte de los teléfonos necesarios para el proyecto, “algo que hasta ahora las autoridades nacionales nos dicen que no va a ocurrir”, indicó el funcionario fueguino. Fuente: U24