RÁNKING PISA: ARGENTINA ALTERÓ LA REPRESENTATIVIDAD DE LA MUESTRA

Las sombras de Guillermo Moreno y de Milagro Sala eclipsan el pan dulce de Macri Jorge Todesca se pasó el año restañando las heridas que Guillermo Moreno dejó en el INdEC, y en el último mes salta otro dibujo estadístico, pero desde México, donde la OCDE detecta antes de publicar el ránking PISA que mide la calidad de la educación media que Argentina presentó alteraciones en las escuelas y alumnos que integraron la muestra respecto de 2012. O sea cambió la base de comparación. Si bien los resultados corresponden a 2015, cuando gobernaba el kirchnerismo, otra vez la credibilidad del país quedó dañada, cualquiera sea el signo político que ocupe la Casa Rosada. Es el tema que instala La Nación en esta breve semana hábil, mientras Clarín le baja una idea a Mauricio Macri “y su ballet” para mitigarle la obsesión de que transcurra diciembre con las calles en paz y sin que se p ropague la veneración de la bandera de Milagro Sala: convertir a los dirigentes piqueteros en burócratas sindicales, dándoles el manejo de una obra social propia.

El presidente Mauricio Macri, junto a papá Noel.

Parece que el ex secretario de Comercio, Guillermo Moreno, quien se ganó merecidamente la fama de meter “los ganchos” en las estadísticas, no era el único devoto de esas prácticas. Acaba de estallar en el seno de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) otro escándalo que involucra a la Argentina al confeccionarse el ránking de las pruebas de evaluación educativa PISA tomadas en el último año de gestión kirchnerista, al descubrirse que había sido eliminado un número significativo de escuelas del listado presentado en 2015, con lo cual se afectó la representatividad de la muestra. La modificación distorsiona la comparación con los resultados enviados en 2012, cuando la performance registrada de los alumnos de 15 años en los exámenes de matemáticas y lengua relegó al país a uno de los peor es niveles educativos del planeta. Las autoridades primero cuestionaron la forma de medición y para esta siguiente edición seleccionaron escuelas y chicos participantes aunque, según explicó el ex ministro Alberto Sileoni, el listado se hizo en función de adecuarse a la desaparición del EGB y el polimodal del sistema educativo secundario fuera de la región de la Ciudad. Oh coincidencia, la ponderación mejoró. Algo similar había ocurrido cuando Moreno arremetió contra el INdEC con la excusa de que la encuesta de precios estaba construida sobre parámetros perimidos de consumo y, en consecuencia, tampoco reflejaba la realidad más allá de la Capital Federal. A partir de entonces, se desató una guerra en el instituto de las estadísticas, la inflación empezó a dar mucho más abajo que las ponderaciones alternativas y el gobierno de CFK vinculó esa diferencia a razones políticas. Pero en el caso de la s PISA, el cuestionamiento viene del organismo internacional que las tutela y no contará con el laudo discrecional del poder como sucedió con el INdEC y la administración kirchnerista. La Nación abre el lunes en su portada impresa con la nueva adulteración estadística en que incurrió Argentina, la que posiblemente mañana se refleje en los ránkings que difundirá OCDE, en los que la participación del país llevará una descalificación implícita, al incluírsele una salvedad o un asterisco. El diario consultó a fuentes del Ministerio de Educación y para nada descartaron que haya habido intención de sus antecesores en echarle el guante a los resultados, aunque ningún funcionario figura asegurándolo. Por más que esté claro que la irregularidad corresponde al gobierno anterior, el macrismo ya tomó nota de que el crédito político basado en la corrupción ajena tocó un límite y no conviene intentar capitalizaciones. El ejemplo más concreto es el dolor de cabeza que significa a esta altura para Mauricio Macri que la dirigente social Milagro Sala siga presa con toda la comunidad de los derechos humanos en contra y con arbitrariedades en el proceso judicial que avalan presiones internacionales cada vez más acendradas para que la liberen. Si alguna certeza trajo el fin de semana el equipo de gobierno del retiro espiritual de Chapadmalal es que nada importará más este mes que transcurrirlo sin que la protesta social le esmerile el poder político, y a los dos pulgares hacia abajo que deja como sensación y realidad generalizada la economía del primer año de gestión se agrega la suerte de martirio en que el aliado Morales y la justicia jujeña convirtieron el encierro a Milagro Sala. Como describe en la columna de los lunes Carlos Pagni, la Justicia se ha erigido cada vez más en un campo minado para Macri. Cristina Fernández de Kirchner ha sabido sacar provecho mediático de las causas que se multiplicaron en su contra victimizándose como perseguida. Más allá de las pequeñas satisfacciones con que pudo alimentar su ego el juez Claudio Bonadío, al obligar a la ex Presidenta a concurrir a Comodoro Py para “tocar el pianito”, se avanza hacia lo que mejor maneja la ahora imputada jefa de una importante fracción militante del PJ, el arte de la oratoria. El tribunal se convertirá en teatro para una obra que la tendrá como primera actriz. Clarín instala desde la tapa que inicia esta supercorta semana una iniciativa que se impulsa desde el gobierno para cooptar a la dirigencia de las organizaciones sociales alineándolas en un similar estamento de poder económico y representatividad con las centrales de los trabajadores: el de administrar su propia obra social. Millonarias sumas se “derraman” más allá de las reivindicaciones callejeras, lo cual, dada la experiencia con las CGT´s, termina alineando intereses en las mesas de negociación. Los piqueteros hacía rato que le habían tomado la mano a la inexperta y sobreactuada sensibilidad que emanaba del ministerio de Carolina Stanley: le cobraron por adelantado todo lo que pudieron y terminaron mostrándoles a las bases que lo que les daban eran conquistas de la movilización, con lo cual se aseguraron perpetuarlas. El gobierno llega así a diciembre con la billetera dada vuelta y sin ninguna garantía de que dentro de las organizaciones sociales funcionarán diques internos ante posibles desbordes. Y la alternativa de convertir en popes a los punteros, burocratizarlos, darles fondos, escritorio, secretaria y viáticos ha sido una carta de probado éxito en la esfera sindical. Tapiar las calles  La prioridad de mantener las calles tranquilas durante este mes ocupa lo alto del podio en materia de objetivos políticos de la Administración de Macri. El Cronista Comercial le recuerda, sin embargo, el aplazo con que el día después del 1 de enero de 2017 iniciará el año electoral: exhibe en su portada la encuesta del Grupo de Opinión Pública, cuyo staff encabezan Juan Carlos Malagoli y Raúl Timerman, el que responde a la consultora Comunicación Sudamericana, La Agencia, Braga Publicidad y Atómica Producciones, según el cual los argentinos postergaron decisiones de consumo y que en 43,7% califican a la gestión de Macri peor que la de Cristina Fernández de Kirchner. Pero, además, el diario económico consigna que subieron las expectativas de inflación y se le acortó al BCRA el margen para seguir bajando las tasas. El nuevo director, Hernán de Goñi, intenta balancear en su comentario la contundencia opositora de la edición aduciendo que “todavía dura la resaca que causó la fiesta de producción y consumo de 2015”, mientras el columnista externo Luis Majul se pregunta si se terminó la luna de miel de los argentinos con el Presidente. La coincidencia de enfoque que vienen mostrando publicaciones especializadas que responden a líneas editoriales disímiles, como El Cronista Comercial y BAE Negocios, refleja la incertidumbre de la clientela natural de ambas, la City, ante la conducción híbrida que manifiesta la economía multicomando de Cambiemos, paradójicamente ratificada por el Presidente. Que Federico Sturzenegger haya entregado el sable en la contienda que libraba con el ministro de Hacienda y Finanzas, Alfonso Prat-Gay, no hizo más que desnudar los magros resultados del inexpresivo gradualismo que aderezó reajustes de tres dígitos en los precios y las tarifas públicas. Al final no fue ni chicha ni limonada, sino todo junto en vez de nada. Ámbito prefiere centrarse en la escaramuza legislativa por el proyecto de ganancias, que marcará la agenda mediática del martes 06/12. El gobierno aceptó incorporar tópicos del Frente Renovador, que a esta altura parece contentarse con el efecto político “para la foto” que logró anticipando su proyecto al presentado por el oficialismo. Preocupa al mercado de capitales vernáculo el Brexit italiano, con la caída del primer ministro Renzi, que es una mancha más al tigre institucional de la península pero que se potencia con el antecedente londinense que le costó la cabeza al primer ministro David Cameron. Por de pronto, las tasas de largo plazo, en Italian, picaron en alza. Los populismos de Donald Trump y los que se insinúan en Europa constituyen para los sueños de inversión que acaricia Macri una especie de despedida sin debut. Como antes viajaban a China para cerrar negocios los ex ministros K Héctor Timerman, Julio de Vido, Florencio Randazzo y Carlos Casamiquella, ahora hizo las valijas Rogelio Frigerio (n) y partió a la lejana Asia con US$ 33 millones de razones entre manos. A nadie tampoco le saca el sueño ahora tratar inversiones con democracias sui generis como la china y la rusa, o eventualmente contradecir presuntos intereses geopolíticos de la alianza EE.UU.-Europa. Si el mundo se está volviendo populista, ¿por qué renegar de la condición de pioneros contemporáneos que leg ó la experiencia kirchnerista? Ahora se entienden los elogios del jefe del bloque del Pro, Nicolás Massot, hacia el ex ministro y exégeta del neopopulismo keynesiano del fallecido Ernesto Laclau, Axel Kicillof. Un revival del “vivir con lo nuestro”, esta vez referido a los frutos del blanqueo, altera el humor de la City, que advierte acechanzas en puerta, como que se grave el capital ocioso, según menciona Ámbito. Un poco hacia lo que el entretenimiento popular que significa el fútbol ha avanzado en esta última fecha, signada por los homenajes a las víctimas del accidente aéreo que enluta al club brasileño Chapecoense y al deporte en general. Nuestra afición dio vuelta la página con un Boca Juniors entonado tras vapulear a Rácing en la Bombonera para disputar la semana que viene el superclásico con un Ríver que necesita repartirse para la final de la copa Argentina que puede abrirle las puertas a jugar la Libertadores de América el año que viene. La Nación y Clarín dan como protagonista estelar al xeneize, a cuyo ex presidente Mauricio Macri no le vendría nada mal la ofrenda de cerrar este azaroso año con una sonrisa deportiva, mientras se saca de encima el lastre del Fútbol para Todos legado por los K que la dirigencia de AFA negocia con dos cadenas televisivas internacionales. Sería como un primer paso “del palo” hacia el réquiem que el comunicador Marcos Peña anunció para el déficit público récord que dieron las cuentas fiscales, a contramano de las promesas electorales del año pasado. Siguiendo con esa lógica de comportamiento, si en vísperas de la campaña para las legislativas de 2017 aseguró desde el retiro espiritual de Chapadmalal que “nuestro déficit fiscal no es sostenible a mediano plazo”, será cuestión de apurarse a sacar número para demandar subsidios.