SANCOR EN REESTRUCTURACIÓN

La venta de Sancor queda en pañales El miércoles 29/06 se celebra en Sunchales, Santa Fe, la asamblea de la cooperativa Sancor, en la que se debería decidir una reestructuración de la firma láctea y cómo se llevará a cabo, entre lo que se incluye el posible desprendimiento de activos, como la línea de productos frescos (yogures, cremas, postres), elaborados en las plantas de Monteros, Córdoba, y en la bonaerense Arenaza, que se había dado por vendida a Vicentín hace algunos días.

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"Sería un error que se venda, porque es la única empresa que queda en manos de capitales cooperativistas", pero a la vez el secretario de Lechería de la provincia de Santa Fe, Pedro Morini, sugirió: "Tiene que hacer una reestructuración, conseguir más litros de leche para elaborar, suya o de terceros, o achicar la planta laboral porque está sobredimensionada". Morini precisó: “Estamos viendo alternativas de venta o de alianzas, desde hace un tiempo. La cooperativa viene perdiendo producción y el mazazo de las lluvias ( de abril ) fue en desmedro”. En efecto, por la emergencia hídrica, Sancor perdió el 50% de la producción y, al mismo tiempo, el tarifazo eléctrico del 500% provocado por la quita de subsidios llevó a la cooperativa sunchalense al borde del quebranto. Morini estimó que “del 50% que se redujo la producción, se pudo haber recuperado el 8%.” Pero “nos va a costar hasta junio del año que viene ponernos en carrera”. Propuso Morini que el gobierno nacional dé una mano, pero no en el sentido de subsidiarla, sino de buscar una reingeniería financiera, una ayuda económica, algo como una prefinanciación de exportaciones". De lo que se defina en la crucial asamblea están pendientes 4.600 empleados y 1.600 tambos de Santa Fe y Córdoba, a los que el complejo lácteo le compra su producción. “Bajo ningún punto de vista, la compañía pretende vender alguna de sus 12 plantas industriales, o alguna línea de productos, ya que la intención es mantener la mayor participación accionaria en todos los rubros”, afirmó tajantemente un directivo que se contactó desde la sede del complejo lácteo con El Portal del Interior. También aclaró que “el sistema de retiros voluntarios funciona desde 1999, y que no está prevista la reducción de personal, quitando dramatismo y llevando tranquilidad a la cuenca tambera que comparten cordobeses y santafesinos”, agrega el portal. Coincidentemente, en las últimas horas, el representante de la cerealera familiar, Alberto Macua, también lo desmintió: "Existen negociaciones para avanzar en una alianza" expresó en diálogo con Télam, pero "no hay una compra ni un acuerdo”, sostuvo. El propio poderoso grupo económico, que nació en el área metropolitana Reconquista-Avellaneda e integra el polo portuario San Lorenzo, había sido más que explícito hace un mes cuando arreciaban las versiones de la operación con Sancor: “No nos interesa ese negocio, Vicentín está en otras inversiones. Con Sancor se habló hace unos años, pero después quedó todo en la nada y se descartó totalmente", publicó ReconquistaHOY como declaraciones de uno de los directores, quien aclaraba que el nuevo emprendimiento de Vicentín es la fábrica de pañales que está a punto de inaugurar y comenzará a producir el mes que viene, entrando a pleno en julio, con una producción de 500 pañales por minuto. Llamativamente, la semana pasada fuentes de la cooperativa láctea SanCor habían ratificado ante medios nacionales que se acordó la venta de la línea de frescos a la firma Vicentín. E indicaban que la aceitera iba a desembolsar $ 51 millones para asociarse a la firma lechera, que de esa manera encontraría una herramienta para descomprimir su situación financiera. Huele a operación de prensa, porque en esos momentos la cooperativa láctea negociaba con el Banco Nación una refinanciación de deudas por más de $1.000 millones, un pasivo que determinó que en los últimos meses se abriera la posibilidad de la venta de alguna de sus líneas de productos, como ocurrió con las fórmulas infantiles que la firma Mead Johnson adquirida en 2012 bajo el formato de una alianza. Sancor tuvo pérdidas por $1.527 millones en el 1er. trimestre, un 316% más que los $367 millones de igual período de 2015, el que de por sí fue un año enteramente en rojo. Con estos números fue al Banco Nación para refinanciar deudas a cuenta del fideicomiso entre Argentina y Venezuela constituido en el organismo. El gobierno de Nicolás Maduro, que debía US$ 158 millones por el envío, a principios de año, de 40.000 toneladas de leche en polvo, depositó una parte del dinero El contexto no ayuda: cayó el precio internacional de la leche en polvo, hay sobreoferta en el mercado interno y los precios están regulados. Pero en la gobernación provincial descreen que esta sea la causa del quebranto de la cooperativa, sino que le apuntan al management. Es que, si bien el otro pez gordo del sector, la firma Mastellone, también tuvo grandes pérdidas esta trimestre ($140 millones), logró reducirlas en un 23% respecto de igual período del año pasado y limitarlas a menos de un décimo de las pérdidas de SanCor. Poder adquisitivo del tambero Según un informe de la revista Márgenes Agropecuarios, el poder de compra de los tamberos sufrió un fuerte deterioro en el último año. Con un precio como el que recibe, "que se ha quedado atrás" frente a la suba de la mayoría de los costos, para esa publicación la comparación de la capacidad de compra del litro de leche en mayo 2016 versus mayo 2015"muestra una ecuación compleja, que lleva a muchos tambos a zona de quebranto". En mayo de 2015, con un precio de la materia prima en US$0,36 el litro, con 303 litros de leche el productor podía comprar una tonelada de maíz. En mayo pasado, en tanto, con una leche en US$0,22 le hacían falta 877 litros, un 190% más. El maíz, insumo clave en los tambos, estaba en US$109 la tonelada y pasó a U$S 193 la tonelada. Para la energía eléctrica, en mayo de 2015 con 0,21 litro de leche el tambero pagaba un kwh. Ahora requiere 0,71 litro, más de un 230% de incremento. "No es solamente una cuestión derivada de la devaluación, sino también de aumentos en el precio del maíz (por baja a cero de retenciones y eliminación de Roes) y de una inevitable actualización de las tarifas eléctricas", señala el informe, según publica La Nación. "Tanto el aumento del maíz como de las tarifas era previsible, pero la situación se ha tornado más compleja por el rezago en el ajuste en el precio de la leche", agrega. Si se ve el caso de la alfalfa, el año pasado con 27 litros de leche se adquiría un kilo de esa forrajera. En mayo de 2016 se pasaron a requerir 39 litros de leche. Según Márgenes Agropecuarios, con un precio para la leche de 28 centavos el litro ($4) en junio de 2016, "la ecuación mejora, pero sigue en terreno negativo respecto a la situación vigente en mayo/15".